Logo del Pompidou Málaga, obra del estudio C. Album, Laurent Ungerir.
Si hablamos de Málaga y arte ya es hora de dejar de lado a Picasso, sin olvidarlo por supuesto no queremos mosquearlo. Málaga se está convirtiendo en una ciudad cultural con la llegada de dos centros de arte de primer nivel. La primera sede fuera de Francia del Centro Georges Pompidou y la primera delegación europea del Museo Estatal Ruso de San Petesburgo que junto al Museo Carmen Thyssen Málaga, el centro de Arte Contemporáneo y el Museo Picasso convierten a Málaga en un centro cultural de referencia.
El espacio expositivo en el que podremos ver la sede del principal museo francés de arte del siglo XX y XXI es el llamado El Cubo en el puerto de la ciudad con 6.300 metros cuadrados en el que encontraremos las obras de los grandes de la Historia del Arte del siglo XX. Tras la inauguración, el próximo 28 de marzo con las autoridades y gestores culturales, podremos disfrutar de la colección permanente con más de 80 piezas y se celebrarán de dos a tres exposiciones temporales.
Sede del Museo Estatal de San Petesburgo
Por otro lado, hoy se inaugura la subsede del Museo Estatal de San Petesburgo, casi nada, el museo de arte ruso más grande del mundo con más de 400.000 piezas. Vaya semana en Málaga. En más de dos mil metros cuadrados del antiguo edificio deTabacalera vamos a poder disfrutar de la colección del museo ruso, claro que el Hermitage era mucho pedir y muy ambicioso por parte del alcalde de la ciudad Francisco de la Torre.
Obras de entre los siglos XV y XX se han trasladado al calorcito de la Costa del Sol, desde piezas bizantinas a obras de Kandisnsky o Chagall, lo que ha supuesto para el Ayuntamiento un gasto de 3,69 millones de euros anuales, menos que el centro francés con un coste de 2,58 millones.
Además de la colección permanente que cada año se renovará con los fondos del museo ruso esta sede malagueña inaugura con la exposición temporal dedicada a Sergei Diaghilev, fundador de la compañÃa de danza Los Ballets Rusos.
Málaga va más allá del turismo de sol y playa, se encamina hacia el turismo cultural pisando fuerte. Una clara apuesta por la cultura.
