El que es artista lo es y lo será siempre. Por eso vuelve David Bowie con un segundo disco después de sorprendernos el año pasado con el álbum, The Next Day, tras su retirada hace una década. El artista británico saca de nuevo disco el próximo mes de noviembre y se llamará Nothing has changed, con lo que viene a decirnos que nada ha cambiado y que, después de medio siglo de carrera, Bowie sigue dando guerra y rompiendo moldes.
A principios de los años 60 un joven inglés, que seguía la moda Mod, empezó a tomar clases de música y danza, clases de saxofón y a tocar en varias bandas. De ahí a grabar su primer álbum pasaron pocos años. Y así uno, después otro y otro… hasta 27 discos sumados a películas, teatros, pintura, composiciones para otros grandes artistas, etc.
Se trata de 50 años de carrera en los que Bowie ha conquistado a toda una generación y ha sabido conquistar a las que venían detrás. 50 años que le han servido para convertirse en un icono y en inspiración para muchos otros, siempre capaz de reinventarse. 50 años en los que su voz ha llenado escenarios, haciendo de éstos verdaderos espectáculos donde no faltaba la danza, la interpretación y la música. 50 años en los que su mirada perturbadora con su sempiterna pupila dilatada ha conquistado a miles de personas. 50 años en los que ha experimentado con la música, la pintura y la interpretación.
Ahora David Bowie vuelve y lo hace con un álbum retrospectivo incluyendo también un nuevo tema Sue (Or In A Season Of Crime), especialmente escrito para este álbum. El 17 de noviembre sus fans pueden volver a disfrutar de su trabajo y, por otro lado, esa nueva generación que no lo conoce todavía tiene ahora una muy buena oportunidad para descubrir a uno de los artistas más innovadores que ha marcado la historia de la música del último siglo. Artista que, fíjate tú, incluso tiene un día oficial en Chicago, el 23 de diciembre.
Como bien dice David Bowie en uno de sus mayores éxitos Changes, Just gonna have to be a different man, es decir, sólo tienes que ser un hombre diferente. Y eso es él, un hombre diferente.
