Entre el 17 y el 21 de abril de este año, 2014, toda comunidad cristiana estará celebrando la fiesta más importante del cristianismo: la muerte y resurrección de Jesucristo, el sÃmbolo de la fe.
En esta entrada de nuestra sección de Cada fiesta es un mundo nos centraremos en dos de las procesiones más emblemáticas de esta semana tan cargada de sÃmbolos y pasión: La procesión Ecce Homo de Braga, Portugal, y la Misa de Pascua de Resurrección en la plaza San Pedro de Roma.
Ecce Homo, Braga
Braga se considera el centro espiritual de Portugal. Es una de las ciudades en la que la religión católica se revela plenamente. Con más de 35 iglesias, hermosos edificios y monumentos, es la ciudad que ha entrado en los libros de cultura por su imponente procesión de la Semana Santa. La espléndida Catedral de la ciudad fue construida en el siglo XII en el mismo sitio que ocupaba una antigua iglesia destrozada por los musulmanes. La relevancia religiosa de Braga hace que las celebraciones de Semana Santa sean aquà especialmente impresionantes y atraen cada año a más de 50 000 visitantes de España, Francia y Portugal. Los portugueses dicen:
Lisboa gasta, Coimbra estudia, Braga reza y Oporto trabaja.
Durante la Semana Santa, Braga se convierte en el segundo punto de interés para los creyentes católicos, después de Roma. Es una semana de varias procesiones. La más impactante es la del entierro del Señor y la más popular es la Procesión de Nuestro Señor Ecce Homo, que se celebra el Jueves Santo y en ella se representa la agonÃa de Cristo en Ghetsimani, su traición y su arresto. Cientos de devotos, conocidos como Farricocos, con vestidos y capuchas negras, cargan con teas encendidas mientras escoltan una imagen de Cristo atado y con una corona de espinos.
Muchos de estos Farricocos van descalzos, lo que hace la ceremonia incluso más impactante. La procesión sale de la Catedral, recorre las calles cercanas y vuelve de nuevo dentro del templo.
La procesión de Ecce Homo fue establecida por la reina Leonor en 1498. Merece la pena asistir a esta celebración sea cual sea tu opinión con respecto a la religión, ya que nos muestra una vez más la importancia que ha tenido –y aún tiene– la religión en los paÃses católicos, y nos enseña en vivo la pasión autentica de los creyentes.
Misa de Pascua de Resurrección en la Plaza San Pedro de Roma
En el calendario cristiano no hay fecha más importante que la Resurrección de Cristo, y quién va a celebrar con más entusiasmo esta conmemoración que el alma del catolicismo, la Catedral de San Pedro de Roma. Para los católicos romanos no hay mejor sitio en el que estar en ese dÃa que en la plaza que reúne a millones de fieles. La misa más importante se celebra el Domingo de Ressurección, definitivamente la misa más emblemática, más cautivadora y con más asistentes que cualquier otra misa cristiana.
La gente empieza a congregarse en la plaza con muchas horas de antelación. Toda la plaza y las escaleras de la entrada de la iglesia están recubiertas de flores que adornan hasta el último rincón. Los sacerdotes visten sus fantásticos atuendos y el Papa llega vestido en sus suntuosas vestimentas. La misa empieza con las primeras entonaciones del coro. Unas pantallas enormes permiten que los que están lejos del altar puedan ver con claridad. La magnÃfica guardia suiza se mantiene en posiciones de firmes. El primer acto finaliza con la bendición papal.
En la segunda parte de la ceremonia el papa reaparece en un balcón de la fachada para pronunciar su discurso anual urbi et orbi –a la ciudad y al mundo–, en el que dirige su atención hacia problemas de diferentes partes del globo. Tras el discurso, el papa saluda y bendice a todo el mundo.
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Creyentes o no en la fe católica, durante esta semana las celebraciones tendrán como enfoque las Pascuas. Ecce Homo en Portugal y La Misa de Resurrección del Vaticano son definitivamente las cumbres de esta fiesta cristiana.
