No pienses, corre es un manual que todo runner debería tener en su biblioteca, un libro con mucho fondo. Sin duda, práctico; sus textos transpiran ilusión y nadie podrá decir que se ha aburrido al llegar a la meta. Un niño que salió a su padre: Chema Martínez. Ni pretende ser ni es, una obra literaria que compita con el Corre, Conejo de John Updike. Su interior es acogedor, como un dormitorio rosa para niñas, no hay secretos. Simplemente, y no es poco, encontrarás la motivación para calzarte las zapatillas y salir a sudar la gota gorda, ¡hay que bajar esa barriga que te acompleja! Para ello, nuestro amigo recoge muchísimos consejos provechosos. Créeme, puedes mejorar incluso atándote los cordones. El running es ese deporte que hace años llamábamos footing… y en los tiempos de las cavernas, “salir a correr”, a secas. Cuestión de glamour. Evolucionamos… en las formas. ¡Que llueva purpurina!
Un corredor es un sufridor que necesita asesoramiento si quiere progresar. Ante la duda, no hay que salir pitando, hay que parar e informarse. La preparación es esencial, necesaria. Y no todos podemos pagar un entrenador personal, pero si has llegado hasta aquí… sabes leer. Este mundo de camiseta y pantalón corto no es tan sencillo como aparenta a primera vista. Si tu linaje no entronca con el del Correcaminos o con el de Forrest Gump, las recomendaciones de Chema optimizarán tu rendimiento.
Hace bien poco, mientras daba patadas al asfalto junto a unos amigos, me gruñeron y a duras penas, llegué a entender algo así como “no permitas que alguien te diga que no eres lo suficientemente bueno, y entrena como si fueras el segundo para ser el primero”. ¡Optimistas! ¡Ingenuos! Yo entreno para no ser el último…
Hay que saber correr todo tipo de competiciones, en superficies diferentes, superando cualquier adversidad climática, conocer qué atuendo es el más adecuado para cada carrera, retirar sombras que llegan con las posibles lesiones, conciliar los entrenamientos con la familia… ¡quieto parado! No te asustes si eres un principiante, tendrás tu bienvenida.
La motivación, los estiramientos y la alimentación son claves para un gran atleta como Chema Martínez. Pero no se olvida de la recuperación, y de la gran pregunta… ¿adelgazo si corro?
¿Y quién es él? Un tipo que me cae fenomenal, al que escucho en la COPE en su sección KM 42. Otro mundo, el de los podcasts. Te recomiendo su sección. Aunque no creo que compres el libro solo porque sea un tío majete. Necesitará otras referencias, supongo. En su palmarés destacan las dos medallas obtenidas en los 10000 metros de los Campeonatos europeos de 2002 (oro) y 2006 (plata), y junto a ellas, subiría al pódium, la plata en el maratón del Campeonato Europeo de Atletismo de 2010 celebrado en Barcelona. A esas menudencias al alcance de cualquiera, le sumamos muchos triunfos en carreras “menores”. Fama y honor. La Behovia-San Sebastián o la San Silvestre Vallecana, entre otras. Chema Martínez ha sido capaz de hacer 27:30.56 en un diez mil, 1:02:36 en una media, y 2:08:09 en un maratón. Vamos, valiente, todo tuyo. Supera esas marcas. Un crack, un figura.
El purgatorio sí existe, bien lo sabe Murakami, otro fanático del running, un pecador que purifica su espíritu y su cuerpo corriendo maratones cada año, aunque no llega a la locura del ultrafondista, Kilian Jornet. El nipón repite para sus adentros una frase que una vez escuchó a un atleta de élite:
El dolor es inevitable, el sufrimiento, opcional.
Roba esa frase y si tienes entre ceja y ceja alguna carrera popular o la San Silvestre de tu ciudad… lánzate. Compra el libro. No pienses, corre, te pide a gritos que mires a la cara al deporte. Incluye tablas de entrenamiento que pueden hacerte ganar más de una apuesta… busca tus sensaciones y pásate al lado oscuro. Allí te esperamos.
Mi pasión es el deporte y mi vida gira en torno a él. Después de muchos años en la alta competición y con la fortuna de haber saboreado el triunfo, sigo disfrutando y viviendo cada entrenamiento con la misma ilusión y afrontando mis retos con el mismo entusiasmo. Podría decirse que, en este momento, estoy en el último kilómetro de mi maratón y voy hacia la meta sin miedos porque sigo siendo un aficionado más. Por ello, y con toda la experiencia adquirida durante estos años, en este libro me atrevo a dar consejos para animar, ayudar o motivar a todos aquellos que quieren empezar en este maravilloso mundo del running.